El Gran Cortafuegos (en inglés Great Firewall, GFW, en referencia a la Gran Muralla China, Great Wall of China) es el término que acuñaron los medios de comunicación occidentales para referirse a una serie de medidas legislativas y tecnológicas desplegadas por China para regular el uso doméstico de Internet. En gran medida, el objetivo ha sido acabar con cualquier forma de crítica y prevenir la filtración de información del exterior que el gobierno considera “perjudicial para la paz y la armonía del pueblo chino”.
Aunque el historial del Partido Comunista de China (PCCh) en el control, limitación y emisión —en forma de propaganda— de la información es muy largo, remontándose a la fundación de la República Popular de China en 1949, en 1997 adquirió una nueva dimensión. Durante este año se lanzó el Proyecto Escudo Dorado (jīndùn gōngchéng, 金盾工程), también conocido como Proyecto Informativo de Trabajo de Seguridad Pública Nacional.
A pesar de que el proyecto se lanzó muy temprano, casi al mismo tiempo que la llegada de Internet a los hogares chinos, el Gran Cortafuegos no se podría a funcionar en toda su capacidad hasta 2008. Desde entonces, China ha restringido el acceso a Google y Wikipedia; a redes sociales como Facebook, Twitter o Instagram; a plataformas de streaming como Netflix; a medios de comunicación mainstream como el Times, el Journal o Bloomberg, y a sitios web de contenido pornográfico, como Pornhub. La lista es interminable, pero se pueden conocer, casi en tiempo real, qué sitios web bloquea China, a través de GfWatch.
EL PULSO ENTRE GOOGLE Y EL GOBIERNO CHINO
Acceder a populares sitios web occidentales se ha convertido en un rompecabezas, requiriendo un mayor esfuerzo para los usuarios, que tienen que abonar un monto para utilizar servicios VPN (Virtual Private Network) que sirvan para sortear las restricciones. Bloquear el acceso a sitios web considerados perjudiciales es solo uno de los métodos dentro de la “caja de herramientas” que tiene el PCCh a su disposición para restringir el contenido local y extranjero. Otro es la filtración por palabras clave, que consiste en el bloqueo de páginas web que contengan palabras sensibles, como por ejemplo “Dalai Lama” o “Movimiento Democracia del 89”. Las regiones administrativas especiales (Hong Kong y Macao) no están sujetas a las estrictas normas de censura aplicables al resto del país.
El Proyecto Escudo Dorado, retomando el control de la información
El Proyecto Escudo Dorado llegó para responder a la amenaza que suponía Internet, cuyo uso comenzó a extenderse en el país apenas tres años antes, en 1994, coincidiendo con el año en el que Tim-Berners Lee publicó la primera página web del ciberespacio. El PCCh, desde el principio, ha sido contrario a la extensión de las libertades al dominio de internet, abogando, al igual que otros regímenes, por el concepto de cibersoberanía o gobernanza de internet.
Como parte integral de los 12 Proyectos Dorados del gobierno chino —dedicados a fortalecer la supervisión y eficiencia; salvaguardar los ingresos y racionalizar el gasto público, y garantizar el orden básico de la economía y el desarrollo social—, su objetivo inicial era “la adopción de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) para fortalecer el control central policial, su grado de reacción y su capacidad para combatir el crimen, así como mejorar la eficiencia y efectividad de la labor de seguridad pública”.

De esta manera, el gobierno chino pretendía dotarse de sistemas de información y gestión de la seguridad, de información criminal, de salida y entrada de información, de supervisión y de gestión del tráfico. Su introducción se realizó en dos fases. Durante la primera (1998-2006), el trabajo se concentró en la construcción de la red de comunicación (en sus tres niveles), la aplicación de base de datos y la plataforma compartida.
La segunda fase (2006-2008) comprendió la construcción de la aplicación del sistema, su integración, la expansión del centro de información y la construcción de sistemas de información en las provincias centrales y occidentales. Desde su implementación formal, el sistema ha ido adaptándose a las nuevas tecnologías, incrementando los métodos y el volumen de información filtrada o censurada.
El Gran Cortafuegos puede bloquear una página web por distintos motivos. El criterio lo marca el Comité Central del PCCh con la Comisión Central de Asuntos del Ciberespacio (CCAC), presidida por Xi Jinping desde prácticamente el comienzo de su mandato. Este órgano del partido, junto con la Oficina de Información del Consejo de Estado del gobierno, componen la Administración del Ciberespacio de China.

El órgano ejecutivo es el Departamento de Publicidad del Comité Central del Partido Comunista de China (CCPPD), que se apoya en otras agencias gubernamentales como los ministerios de Cultura, Educación, Seguridad Pública e Industria y Tecnologías de la Información.
Las grandes corporaciones y proveedores de internet, como Sina Weibo —una de las mayores redes sociales en el país—, complementan la labor del régimen regulatorio, practicando una autocensura proactiva.
La censura incluye el bloqueo de palabras específicas (keyword blocking), que pueden dejar en mal posición a los líderes nacionales, violar la Constitución o alterar la “paz de la sociedad”. Según algunos analistas, existen al menos dos sublistas: una de corta extensión cuyas palabras se censuran incondicionalmente y una lista más larga que censura cuando la palabra “search” aparece. Además, se identifica que algunos temas sensibles han permanecido en la lista durante mucho tiempo, como la masacre de la plaza de Tiananmen o la propaganda extranjera.
11 categorías de información susceptibles de ser bloqueadas, censuradas o filtradas
- Violar los principios básicos establecidos en la Constitución.
- Poner en peligro la seguridad de la nación, divulgar secretos de Estado, dificultar la unidad e integridad de la nación, o subvertir el poder estatal.
- Dañar el interés o el honor de la nación.
- Incitar al racismo y el odio o perturbar la solidaridad del pueblo.
- Propagar supersticiones feudales, cultos malvados y perturbar las políticas nacionales en asuntos religiosos
- Afectar al orden social establecido y a la estabilidad social difundiendo rumores.
- Promover el terrorismo o extremismo, o instigar cualquier actividad terrorista o extremista.
- Diseminar obscenidad, pornografía, terror, asesinatos, juego, violencia, fuerza, brutalidad y terror o alentar el crimen.
- Difamar o insultar a terceras personas, infringiendo sus intereses y derechos legales.
- Difamar, insultar o vulnerar el nombre y la reputación de héroes y mártires
- Otros contenidos prohibidos por leyes y regulaciones administrativas
Artículo 6 de las Provisiones sobre la Gobernanza del Ecosistema de Contenido de Información Online. Fuente: Wilmap Stanford.
Algunos de los delitos contemplados por las regulaciones incluyen crímenes familiares en todos los sistemas de regulación cibernética del mundo, como la diseminación de pornografía, la violación de copyright o el fraude. Pero también se contemplan las actividades que “violen los principios fundamentales de la constitución”; o que amenacen “la unificación nacional”, “la unidad entre diferentes grupos étnicos”, “la política estatal sobre religión mediante la propagación de creencias feudales” y “la estabilidad social”.
A nivel doméstico, según indica Margaret E. Roberts en su libro Censored: Distraction and Diversion Inside China’s Great Firewall, algunos estudios teorizan que los esfuerzos se han concentrado en limitar la difusión de mensajes y contenido relacionado con eventos de acción colectiva, activismo, crítica de la censura y pornografía, independientemente del apoyo o la crítica al gobierno.
Cuatro fases de implementación tecnológica
Sonali Chandel y otros autores distinguen cuatro fases en su implementación (y adaptación) tecnológica: el Escudo Dorado bloquea dominios y direcciones IP (Fase I), se implementa la censura de palabras clave (Fase II), se comienzan a detectar VPN y otras herramientas de elusión (Fase III) y se introducen leyes de ciberseguridad centradas en la anonimidad y las VPN (Fase IV).
I
Se propuso un filtro interno que bloqueaba dominios y direcciones IP concretas. Se implementó un sistema para identificar a los usuarios que violaban las reglas. Todos los cibercafés estaban obligados a instalar programas de vigilancia proporcionados o aprobados por la policía local.
II
Se mejoró el Sistema de filtración por palabras clave para detectar el contenido de las páginas web visitadas, incluso en los casos en los cuales se utilizaba conexión a Internet por proxy.
III
Con el apoyo del gobierno, los desarrolladores del Escudo Dorado identificaron algunas debilidades de las VPN. Algunos de los protocolos más utilizados por estas redes, como IPSec, L2TP/IPSec o PPTP, que a menudo empleaban puertos específicos, al procesar las conexiones encriptadas dejaban un rastro distintivo. Muchos servicios VPN, como Free VPN, Green VPN, Jiguang VPN o Tianxing VPN fueron bloqueados.
IV
Beijing implementó legislación primero para regular el contenido de Internet, y después para criminalizar el uso no autorizado de VPN.
Tabla a partir de datos de Sonali Chandel et al.
¿Cómo funciona?
Antes de desarrollar este bloque es necesario conocer un concepto básico de Internet, el DNS. Dentro de la compleja red de redes de Internet, el sistema de nombres de dominio (Domain Name System, DNS) es el encargado de asignar nombres para identificar direcciones IP. Si la dirección IP de esta página web es 192.0.78.176, el DNS se encarga de traducir este conjunto de números y puntos a elsiglodeasia.com, con el fin de facilitar la identificación.
Dentro de la amplia gama de procedimientos para bloquear contenido a los wǎngmín (ciudadanos de la red o netizens) se incluyen otros conceptos como el filtrado de paquetes (packet filtering), aplicación proxy (application proxy), inspección de estados (stateful inspection), o inspección completa de contenido (complete content inspection). Destacan cuatro:
- Bloqueo de DNS: en 2002, China comenzó a utilizar el “Secuestro de Nombre de Dominio”, utilizando un sistema de monitoreo, el Sistema de Detección de Intrusiones (Intrusion Detection System, IDS), proporcionado por los rúters para secuestrar nombres de dominio, restringiendo así el acceso de los usuarios a las páginas webs filtradas.
- Fase de conexión: se contrasta la dirección web a la que quiere acceder el usuario con la lista de direcciones IP bloqueadas. Si está entre ellas, el servidor aborta la solicitud de acceso.
- Bloqueo de palabras clave de URL: aunque la dirección web o URL no esté en la lista negra, se bloquea la conexión en caso de que contenga alguna palabra clave prohibida. En este procedimiento el papel de la compañía estadounidense Cisco, que ha proporcionado a China el 80% de sus rúters, ha sido clave.
- Escaneo de páginas web: cuando un usuario accede a la página web solicitada, el Sistema de monitoreo realiza un escaneo para comprobar que está permitido acceder. Los usuarios deben esperar a que se complete el escaneo, que puede durar incluso horas, para visualizar su contenido.

Implicaciones y percepciones sobre El Gran Cortafuegos
Los que necesitan imperiosamente acceder a contenidos y servicios del exterior como las grandes multinacionales y compañías extranjeras establecidas en el país, recurren, previa autorización de Ministerio de Industria y Tecnología de la Información, a VPN. Por otro lado, aquellas empresas que quieren proteger su dominio web de un potencial bloqueo permanente deben disponer de una licencia ICP.
Fang Binxing y Lu Wei, los impopulares padres del Gran Cortafuegos
El profesor Fang Binxing, antiguo director de la Universidad de Correos y Telecomunicaciones de Beijing, es conocido por el público general como el arquitecto del Gran Cortafuegos. Durante toda su trayectoria, su figura se ha asociado directamente a esta herramienta de censura del PCCh y ha sido víctima de críticas y agresiones. En diciembre de 2010, Fang se abrió una cuenta en Sina Weibo. Tras recibir una ola de críticas en su primera publicación, algunas de ellas en un lenguaje agresivo, se vio obligado a eliminarlo, y desde entonces publica esporádicamente.
El 19 de mayo de 2011, Fang fue golpeado en el pecho por un zapato lanzado por un estudiante de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong que se hacía llamar “Hanjunyi”, mientras estaba impartiendo un seminario de la Universidad de Wuhan. Hanjunyi también lanzó huevos, pero ninguno le alcanzó. El 6 de abril de 2016, el padre del GF, en un seminario sobre seguridad digital impartido en el Instituto de Tecnología de Harbin en la provincial de Heilongjiang, y ante la mirada de los asistentes, tuvo que recurrir a una VPN para acceder a una página web surcoreana. La ronda de preguntas y respuestas se canceló, según uno de los asistentes “probablemente por miedo de que alguien lanzara algo”.
Por otro lado, Lu Wei, que había estado al frente del CCPPD y después de la Administración del Ciberespacio de China, es calificado como el zar de Internet en China. Igual de impopular que el primero, su figura se ha visto manchada en los años recientes por un escándalo de corrupción. Fue juzgado por el Tribunal Popular Intermedio de Ningbo en octubre de 2018, y se declaró culpable unos meses después por haber aceptado 32 millones de yuanes en sobornos. Actualmente se encuentra cumpliendo una condena a 14 años de prisión.
A pesar de que el uso de VPN ha estado en el radar del gobierno chino desde el principio, su prohibición para los negocios no llegaría hasta enero de 2017, cuando el Ministerio de Industria y Tecnologías de la Información emitió un comunicado con el siguiente mensaje: “No está permitido establecer o alquilar canales especiales (incluyendo VPN) para llevar a cabo actividades empresariales transfronterizas, sin la aprobación de las autoridades de telecomunicaciones”.
Los expatriados conforman otro de los grupos que recurren a servicios para sortear las restricciones de contenido de internet en China. El gobierno chino lleva durante años cercando el acceso de los usuarios a los servicios de VPN, pero permanece estando en un área gris. Si se utiliza una VPN en China es más que probable que no haya ninguna consecuencia penal, al menos de momento.
Como se ha explicado, bajo circunstancias normales, nadie tiene el privilegio de acceder a los sitios web bloqueados en el país. Sin embargo, han transcurrido situaciones determinadas en las cuales el gobierno ha permitido el acceso a los visitantes de países extranjeros a Internet sin ningún tipo de restricciones. Esto se ha realizado durante importantes eventos internacionales, como la cumbre del G-20, la Exposición Universal o los Juegos Olímpicos.
El Gran Cortafuegos es, sin duda, la herramienta más desarrollada a manos de un gobierno para tener un control casi completo sobre los contenidos que se publican en Internet. Esta y es indudable que el PCCh continuará cercando el uso de RPV, limitando la posibilidad de los netizens para acceder a contenidos extranjeros. El sofisticado GC se está complementando con otros métodos y tecnologías (de inteligencia artificial) de control e identificación. El polémico sistema de crédito social, que analizaremos en otra publicación, es uno de los ámbitos para la utilización de este tipo de herramientas.

La remodelación de la política exterior china durante la era Xi Jinping
Xi se ha convertido en el líder con más poder en China desde Mao. Su llegada ha supuesto el abandono definitivo del anterior paradigma de política exterior que estaba vigente desde Deng Xiaoping. Los efectos más inmediatos de esta remodelación han sido una mayor concienciación china como superpotencia y un mayor papel en el escenario internacional.